martes, 30 de septiembre de 2014

Gente solitaria


Bukowski le dedicó un poema a Carson McCullers: "todos sus libros de / soledad aterrorizada. / todos sus libros sobre / la crueldad / del amor sin amor".
En The Heart is a Lonely Hunter (El corazón es un cazador solitario), cuatro personajes dan vueltas alrededor de un sordomudo (Singer) en una ciudad del sur de Estados Unidos muy poco tiempo antes del comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Jake, un revolucionario a quien nadie escucha; el Dr. Copeland, un médico negro que predicó toda su vida por el mejoramiento de la situación de su raza; Biff, el pensativo dueño del café del pueblo; y Mick, una chica que comienza su adolescencia.
El sordomudo adopta a estos cuatro amigos cuando pierde a su verdadero amigo, un griego confinado a un manicomio. Cada uno de los personajes forma su propia imagen de Singer y nunca queda claro cuánto entiende Singer de sus nuevos amigos. Biff, el más reflexivo de los cinco, entiende una parte del problema: "¿por qué persistían todos en pensar que el mudo era exactamente como ellos querían que fuera - cuando lo más probable es que fuera todo un error muy extraño?" (p. 224) Con el tiempo, el mudo parece entenderlo: "Al principio él no había entendido para nada a las cuatro personas. Ellas hablaban y hablaban (...) Y después, con el tiempo, él sabía que iba a decir cada una de ellas antes de que comenzara, porque el significado era siempre el mismo." (p. 205)
En un momento, Mick entiende lo más importante sobre su padre, eso que había sentido sin poder ponerle palabras toda su vida: "Era solitario y era un hombre viejo." (p. 101) Jake y el Dr. Copeland discuten de política; uno lucha por los proletarios y el otro por los negros y están al borde de comprenderse pero no lo logran. En esa discusión, el médico le dice a Jake: "Lo cosa más fatal que puede hacer un hombre es intentar plantarse solo." (p. 302)
Todos los personajes, Singer y sus cuatro satélites, intentan infructuosamente evitar la soledad al tiempo que fracasan en sus otras actividades. Copeland no logra transmitir a sus hijos su espíritu de vida; Jake no logra organizar a los obreros; Mick queda atrapada en una vida de adultos y pierde su amor por la música; Biff pierde un amor imposible.
En algún lugar entre Sherwood Anderson y su descripción de los personajes de un pequeño pueblo deOhio y de Flannery O'Connor y la crudeza de la vida del Sur, McCullers nos habla de gente solitaria y de la inexorabilidad del fracaso humano. Pero el libro cierra con un mínimo resquicio de esperanza; Biff tiene una suerte de epifanía, "captó un destello de la lucha y el valor humanos. Del pasaje interminable y fluido de la humanidad por el tiempo interminable. (...) estaba suspendido entre el resplandor y la oscuridad. Entre la amarga ironía y la fe." (p. 358)

 Originales de las citas utilizadas
"all her books of / terrified loneliness
 all her books about / the cruelty / of loveless love"
(Charles Bukowski, "Carson McCullers", en The Pleasures of the Damned)
"why did everyone persist in thinking the mute was exactly as they wanted him to be—when most likely it was all a very queer mistake?" (p. 224)
"At first he had not understood the four people at all. They talked and they talked (...) And then after a while he knew what each one of them would say before he began, because the meaning was always the same. (p. 205)
"He was lonesome and he was an old man." (p. 101)
'The most fatal thing a man can do is try to stand alone.' (p. 302)
"he saw a glimpse of human struggle and of valor. Of the endless fluid passage of humanity through endless time. (...) he was suspended between radiance and darkness. Between bitter irony and faith." (p. 358) 

sábado, 13 de septiembre de 2014

Leerlas

Cuando iba más o menos por la mitad de Too much happiness, de Alice Munro, me dije (le dije a Twitter): "Desde que aprendí a leer mujeres mi vida cambió para bien. (Y dije leer mujeres no leer a las mujeres.)" Me pasó por leer a Alice y me pasó por leer a Gina y a Luchi, dos compañeras de taller que hacen cosas con las palabras que los varones no podemos, creo. ¿Está mal? ¿Está mal decir que hay diferencias entre lo que escriben los varones y las mujeres? No sé, pero Munro hace decir en "Fiction" a un varón que está dejando a una mujer "No hay un nosotros" (p. 38) y sabemos que nos está diciendo que ninguna mujer diría eso. Así como es femenina la noción que le viene a una personaje de que "todas las personas en el mundo están desnudas, en cierta manera. (...) Somos todas criaturas tristes, descubiertas, bifurcadas." (p. 81, "Wenlock Edge") ¿Me gustaron los cuentos de Too Much Happiness? Sí, todos menos el último, el que le da el título al libro, que no terminé, quizás para dejar asentado ante el mundo y ante mí que puedo no terminar un libro, aunque sea dejar de escuchar a una mujer. Y a ellas siempre hay que escucharlas, como a la señora del cuento "Child's Play", que al final nunca se casó aunque había tenido un par de veces la sensación de que llegaría el momento de "abrirse al medio, de someter mucho más que tu cuerpo, tirar seguramente toda tu vida dentro de un canasto junta con la de él." (p. 211) ¿Eso es casarse? ¿Someterse y someter, mientras que la amistad es la igualdad, las historias compartidas? Mucho antes, esa misma señora, siendo chica, se hace una amiga y se cuentan cosas: "Las mujeres adultas hacen el mismo tipo de cosa que hicimos Charlene y yo. No contar los lunares de la espalda de la otra o comparar los largos de los dedos de los pies, quizás. Pero cuando se conocen y sienten una simpatía particular una con la otra también sienten la necesidad de dejar sentada la información importante, los eventos importantes ya sean públicos o secretos, y después proceden a llenar los espacios entre ellos." (p. 192) ¿Nosotros nos hablamos así? Nos hablamos de los lugares de nuestras vidas, somos conscientes de los lugares de nuestras vidas. "Algo pasó acá. En tu vida hay unos pocos lugares, quizás un sólo lugar, donde algo pasó, y después están todos los demás lugares." (p. 162) Desde que aprendí a leer mujeres mi vida cambió para bien, pero no sé bien por qué ni cómo, así como no sé muy bien por qué me gustó Alice Munro y por qué no lo pude terminar, porque todo queda sin cerrarse, todo sigue bajo algún halo de misterio, velado, vedado, femenino.

Vintage, London, 2010 (2009)

Originales de las citas usadas
"There is no 'we', he said." (p. 38)
"The notion came to me that everybody in the world was naked, in a way. (...) We were all sad, bare, forked creatures." (p. 81)
"the time would come when you want to split open, surrender far more than your body, dump your whole life safely into one basket with his." (p. 211)
"Grown-up women do the same sort of thing that Charlene and I did. Not counting the moles on each other's backs and comparing tow lengths, maybe. But when the meet and feel a particular sympathy with each other they also feel a need to set out the important information, the big events whether public or secret, and then go ahead to fill in all the blanks within." (p. 192)
"Something happened here. In your life there are a few places, or maybe the one place, where something happened, and then there are all the other places." (p. 162)

martes, 2 de septiembre de 2014

Cenicienta

"En todos lados la gente hace alarde de las calamidades de sus primeros años, pero nada se compara con la versión irlandesa: la pobreza; el indolente y locuaz padre alcohólico; la madre piadosa quejándose frente al fuego; curas pomposos; maestros de escuela abusadores; los ingleses y las cosas terribles que nos hicieron durante ochocientos años. / Sobre todo - estábamos húmedos." (p. 9)


En el tercer párrafo del libro, Frank McCourt resume buena parte de las 450 páginas de Angela's Ashes, una memoria de su niñez. Después de unos años en EE.UU., la familia de McCourt se va de vuelta a Irlanda escapando de la Depresión. Desde los 3 hasta los 16, McCourt nos cuenta esa infancia de pobreza, alcohol, religión y tuberculosis, con algún que otro golpe bajo pero también con humor. Se escucha el acento irlandés, se ve la humedad y la desolación, mientras el joven McCourt va creciendo entre las obligaciones de la Fe y de la Patria: "El maestro dice que morir por la Fe es una cosa gloriosa y Papá dice que morir por Irlandia es una cosa gloriosa y yo me pregunto si hay alguien en el mundo que quiera que nosotros vivamos." (p. 138) Los curas muestran la doble cara de las obligaciones y la represión pero a veces algunos muestran algo de consideración y misericordia. Un día, en confesión, Frank dice que robó comida a un hombre borracho; el cura le pregunta por qué lo hizo y él responde que tenía hambre: "¿por qué no vas a casa y le pedís algo a tu madre? / Porque me mandó a buscar a mi padre a los pubs, Padre, y no pude encontrarlo y ella no tiene ni una miga en la casa porque él se está tomando las cinco libras que mandó el abuelo desde el Norte por el nuevo bebé (...) él se queda en silencio hasta que dice, Hijo mío, yo me siento acá. Escucho los pecados de los pobres. Asigno penitencias. Concedo la absolución. Yo debería estar de rodillas lavando sus pies." (p. 229/230)
El título del libro hace referencia a esa madre que se queja frente al fuego, a lo que queda del fuego, las cenizas, porque nunca hay plata para carbón. Como acá, cuando fuma con su amiga Bridey, quejándose pero no sin humor: "Bridey le da una calada a su Woodbine, toma su té y declara que Dios es bueno. Mamá dice que está segura de que Dios es bueno para alguien en algún lado pero que no se lo ha visto últimamente en los pasillos de Limerick. / Bridey se ríe. Oh, Angela, te podés ir al infierno por eso, y Mamá dice, ¿Acaso no estoy ahí ya, Bridey? / Y se ríen y toman su té y fuman sus Woodbines y se dicen que el pucho es el único consuelo que tienen." (p. 179)
Vemos también los primeros trabajos del joven McCourt, y sus inicios sexuales, mientras se hace cada vez más claro que la única oportunidad es volver a America, que sólo allí dejará de ser una Cenicienta: "Oh, Billie, Billie, quiero estar en América con vos y toda esa música, donde nadie tiene dientes malos, la gente deja comida en los platos, toda familia tiene un baño y todos viven felices y comen perdices." (p. 346) Aunque a veces largo y muchas veces repetitivo, Angela's Ashes es una buena historia de inmigración y es cierto que pocas cosas se comparan con la versión irlandesa. 

Originales de las citas usadas
"People everywhere brag and whimper about the woes of their early years, but nothing can compare with the Irish version: the poverty; the shiftless loquacious alcoholic father; the pious mother moaning by the fire; pompous priests; bullying schoolmasters; the English and the terrible things they did to us for eight hundred years. / Above all - we were wet." (p. 9)
"The master says it's a glorious thing to die for the Faith and Dad says it's a glorious thing to die for Ireland and I wonder if there's anyone in the world who would like us to live." (p. 138)
"why can't you go home and ask your mother for something? / Because she sent me out looking for my father in the pubs, Father, and I couldn't find him and she hasn't a scrap in the house because he's drinking the five pounds Granpa sent from the North for the new baby (...) he's very quiet till he says, My child, I sit here. I hear the sins of the poor. I assign the penance. I bestow absolution. I should be on my knees washing their feet." (p. 229/230)
"Bridey drags on her Woodbine, drinks her tea and declares that God is good. Mam says she's sure God is good for someone somewhere but He hasn't been seen lately in the lanes of Limerick. / Bridey laughs. Oh, Angela, you could go to hell for that, and Mam says, Aren't I there already, Bridey? / And they laugh and drink their tea and smoke their Woodbines and tell one another the fag is the only comfort they have." (p. 179)
"Oh, Billie, Billie, I want to be in America with you and all that music, where no one has bad teeth, people leave food on their plates, every family has a lavatory, and everyone lives happily ever after." (p. 346)