Hace una semana, en “Y bueno” intentaba minimizar el golpe de la avalancha cristinista. Seguí intentando convencerme un par de días después en “Otras cosas”: decía “que la política importa, sin duda, pero que salvo para algunos pocos profesionales nuestras vidas se hacen en otro lado.” Bueno, resulta que ayer estaba leyendo “Dejen todo en mis manos” de Mario Levrero, y Mario sin saberlo salió en mi ayuda. La novela cuenta la historia de un escritor que viaja por el interior uruguayo (entre las ciudades de Miserias, Penurias y Desgracias) buscando a un tal Juan Pérez, quien había escrito la gran novela uruguaya.
"Según Juan Pérez, o según yo había querido comprender, democracia y dictadura militar eran dos caras de una misma moneda, y la vida, la vida real y verdadera, transcurría en otros lugares, en otros niveles. Aplausos para Juan Pérez."
Así que sí, hay cosas por afuera de la política: la vida real y verdadera transcurre en otros lugares y en otros niveles.
(Espero que no haga falta aclarar, ¿no? Somos democráticos, no nos gustan las dictaduras, etc., etc. Y la cita es de Levrero, no es mía, etc., etc. Un poquito de sentido figurado y menos literalidad, ¿dale?)
che, como vas a estar a favor de la dictadura! (jajaja guiño guiño)
ResponderEliminarcoincido yo también con la cita de M.L. Soy hijo de padres que vivieron en años de dictadura (soy 82 hijo de la democracia) pero les pasó por al lado. su vida transcurrió por otros lugares, en otros niveles. que suceda es lógico y quizás hasta deseable. justamente me parece que la deuda pendientes en nuestras democracias jóvenes tiene que ver con unir la vida real con las que transcurre en otros niveles. porque por otro lado la relación es tan concreta como ser parte de la misma moneda. creo que la disociación de esos ámbitos, el real y el "real político" por llamarlo de alguna manera desalienta muchos avances sociales políticos y culturales.
un abrazo
btw, cuando me asumo hijo de la democracia también acepto la idea de padres imperfectos :P
ResponderEliminarsoy un poquito sensible a este tema, y el de fran, no es mi caso, nací en el 75 y recuerdo a mis abuelos enterrando los libros de mi tío en el fondo de casa. recuerdo mi madre cerrando las ventanas y persianas para escuchar serrat y a mi padre aterrorizado cada vez que nos paraban en un control policial. y eso que vivíamos en un pueblo perdido de la patagonia norte y mis padres no militaron hasta el 83.
ResponderEliminarGracias, Fran.
ResponderEliminarNoe, lo de no tomarlo literal no te fue, no? El tema era poner en la dicotomía política dictadura / democracia otras dicotomías políticas dentro de la democracia: radicales / peronistas, kirchneristas y antikirchneristas, liberales y conservadores, etc., etc. Y que más allá de qué lado de la moneda esté, la vida pasa por otro lado. Y, de nuevo, sin dejar de reconocer lo obvio, que duera de la democracia siempre es todo peor, como bien mencionás.
Fernando, creo que entendí la cita pero no concuerdo para nada con ella. Muchas de las cosas que pasan en nuestras vidas, nos gusten o no, estan motivadas por decisiones políticas, y ahí si cuenta si estamos viviendo en una dictadura o una democracia. Ejemplos? sobran.....un artista, un maestro, profesionales de diversas disciplinas deben adaptar su trabajos o sus obras en función de una realidad política...y eso es parte de nuestra vida. No sé, tal vez estoy equivocado pero me parece que ese autor curte la onda de la "no política" con la que no concuerdo absolutamente para nada. Saludos y gracias por el espacio.
ResponderEliminarSergio, no sabés cómo afecta un discurso de Cristina lo que siento por mis hijas.
ResponderEliminarFernando...no chicanées...me parece que estás para un poquito más. Sabés perfectamente lo que te quiero decir. preguntále a los tipos que le robaron los ahorros en el corralito si una decisión política no les afectó la vida....preguntále a la hija del gordo García Blanco si una decisión política no le afectó la vida ¿te animás? todo bien con vos...pero esa visión de la política tipo propaganda de yogur Ser no me va. saludos y gracias por el espacio.
ResponderEliminarSergio: que me acuses de chicanear cuando hablo de mi relación con la política (no la tuya, no la de Cristina, sino la mía) es un poquito demasiado.
ResponderEliminar