Un beneficio secundario de las elecciones es que vamos a lugares a los que normalmente no entramos. En mi caso, el colegio Domingo F. Sarmiento de la calle Libertad, en la ciudad de Buenos Aires. Parece que en ese colegio hay una fauna especial: hay zorras voladoras, que extrañan a personajes desconocidos y seguramente entrañables.
Ya tuvimos un post con título "Mientras tanto, en Ciudad Gótica".
Nos parecía que esto merecía un "Santas zorras voladoras".
los adolescentes, pre adolescentes y otros son unas "personas interesantes". mi sobrina empieza a transitar una de esas categorías y no te imaginás los sobrenombres que se pone en fcbk.
ResponderEliminarEl nombre resulta ingenioso y hasta divertido....lo que me revienta, y te lo digo así porque como docente es algo que me saca, me violenta, es ¿hay necesidad de escribir las paredes o los bancos del colegio? cuando en los colegios donde trabajo, públicos o privados, es lo mismo, encuentro un piso sucio, una pared o un banco escrito me salta la térmica: a barrer y a limpiar todo el mundo, le guste a quien le guste y proteste quien proteste. Perdón que me salí del tema. saludos y gracias por el espacio.
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