Uno de los mensajeros fue el ministro de Economía, Amado Boudou, que cuestionó la semana pasada a Shell con un frase que no hizo más que confirmar que vender combustibles no es negocio en la Argentina. "El caso es particularmente irritante -dijo Boudou-, porque en diciembre se habían acordado, con el conjunto de empresas que abastecen el mercado, los precios para el primer semestre. Shell después avanzó con subas en las naftas y el gasoil. El esfuerzo grande lo hace YPF, que atiende al 64% del mercado sin modificar los precios." La frase fue tomada por blogs políticos como el del analista Fernando Santillán, que consignó: "Si no hay inflación, como él dice creer, vender más sin modificar los precios debería ser no un esfuerzo sino un gran logro y una alegría".En este nuevo acto del drama (o la comedia o la farsa) de los combustibles, quizás el comentario más interesante es sobre la comunicación (o su ausencia). En un contexto donde nadie sabe a qué atenerse (¿el mercado está regulado o no? ¿hay libertad para fijar precios o no? ¿el consumidor puede elegir o no? ¿hay inflación o no?), los actores tampoco saben qué pueden o no pueden decir. De allí el silencio. Y de allí a que un blog desconocido (por ahora, porque recién empezamos, ¿no?) pueda ser fuente nada menos que de La Nación.
martes, 8 de febrero de 2011
Cuando un blog es fuente
El entuerto Shell sigue adelante y nadie más habla: ni Shell, ni el Gobierno ni YPF. Debe ser por eso y no por la agudeza de mis comentarios, que el amigo Olivera me cita en su nota de hoy en La Nación.
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Felicitaciones!!
ResponderEliminarMuy bueno el blog! La "mezcla" entre actualidad, historia y literatura es realmente muy buena, hace que el blog sea muy interesante y muy ameno de leer.
Felicitaciones de nuevo por lo de La Nación, un muy lindo y merecido reconocimiento.
Excelente!!!! La agudeza del comentario merece una felicitación.
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