En el “Post inaugural” explicaba la razón del nombre de este blog: es el tren que suelo tomar y en el que muchas veces se me ocurren cosas que quiero pensar y escribir. Con el tiempo noté que el mismo tren es fuente de inspiración: como cuando me quejaba de gente que no paga el boleto e igual pide solidaridad, o como cuando noté que el precio bajaba para facilitar el cambio ante la ausencia de monedas. Ayer en Clarín una nota hablaba de estos y otros temas y me llamó la atención cómo alrededor de los trenes suburbanos de Buenos Aires se cruzan tantas cuestiones complejas de la actualidad argentina: la falta de respeto a la ley y casi diría vergüenza de la autoridad para hacerla respetar; fallas de funciones básicas como la regulación de la moneda; la seguridad; los subsidios que terminan subsidiando a ricos en vez de a pobres; etc.
Lo que a mí más me llama la atención es el temor a hacer valer la ley: “Lo que nadie termina de decir en voz alta pero todos insinúan es que, si hay que elegir, prefieren que un porcentaje de usuarios sigan viajando sin pagar y así evitar que se produzcan desmanes como los que a principios de mes dejaron inactivos 22 coches del Sarmiento.”
Así, el tren pasa a ser un ejemplo de una sociedad reñida con la ley.
El problema de que esto siga avanzando, es que luego se cree derecho adquirido y es mucho mas difícil de frenar. Como la toma de casas, o el corte de vías de tránsito. La crisis 2001 nos dejó con muchos "derechos adquiridos" nocivos y la política anti represión de todo (y el todo critica la falta de represión a lo ilegal, que justamente es la represión legal) están haciendo que no esté bueno AMBA (Realmente esto, es mas típico del AMBA).
ResponderEliminarno creo que le afecte económicamente a la empresa, sino ya hubieran tomado medidas. los subsidios alcanzan y ganan una batalla moral: se sigue perpetrando un sistema donde no pagar un boleto te convierte en un corrupto y te priva de criticar a los verdaderos corruptos que se hacen millonarios con el dinero del estado.
ResponderEliminarMuy buenos puntos de los hermano Carioli. Creo que hay un tema que es el desdibujamiento del principio de autoridad (y los que estamos más a la derecha nos preocupamos antes por estos temas); otro es el de la eficiencia económica (¿tiene incentivos el empresario para invertir y dar un buen servicio?); y un tercero es el distributivo: es un escándalo que yo esté siendo subsidiado para llegar en tren y subte al trabajo por $4,20 por día ida y vuelta. Es un escándalo. Pero nadie se escandaliza. Recomiendo el documento de Pensar por este tercer tema (http://fundacionpensar.org/biblioteca/subsidios-al-transporte-de-pasajeros/)
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